Wang-lun, Google y #MWC16

24/02/16

Siguiendo el insigne ejemplo de Wang-lun, Google encadena tres magníficos saltos ante la incondicional admiración de los entendidos.

El primer salto ha sido la victoria en los tribunales ante Streetmap : el High Court del Reino Unido ha decidido que Google no infringió las reglas de la libre competencia ajustando los resultados de sus búsquedas para favorecer su propio producto de mapas. Lo que más llama la atención es que el alto tribunal considerase que el producto de Google, simple y llanamente, es mejor (¡atiza…!)

El segundo Gran Salto hacia Adelante probablemente hubiera preferido ahorrárselo, puesto que ha llevado a Google derecho al campo minado de la evasión  fiscal. La empresa está negociando con las autoridades fiscales de distintos Estados Miembros de la Unión, mientras que la Comisión sopesa incoar procedimientos por Ayudas de Estado.

El tercer salto es el que dará el Consejero Delegado Sr. Pichai a Bruselas esta semana, para reunirse allí con la Comisaria Vestager y con el factótum de la Comisión, Selmayr. Sin duda alguna es este el salto más interesante de los tres, dada la escasez de noticias sobre la investigación en curso. Lo cual no debe sorprendernos, puesto que este expediente evoca la bella pregunta retórica de Gellhorn y Kovacic, “¿hemos de condenar el ejercicio de poder de mercado a pesar de que éste sea fruto de un esfuerzo concurrencial que por otra lado aplaudimos?”

A diferencia de las empresas tecnológicas dominantes de algún precedente clásico de la UE, com puedan ser Racal Decca, IBM o hasta Microsoft, parecería que la posición de Google en el mercado se debe principal o incluso exclusivamente a la libre elección, no sujeta a restricción alguna, de los consumidores. No es fácil atisbar por qué había que incoar un expediente sancionador.

La Comisión parece convencida de que Google puede apalancar su poder en el mercado de los buscadores en cualquier otro mercado que le plazca. Los abogados de la empresa, a su vez, presentan una lista de projectos fracasados de Google. Lista que, dicho sea de paso, podría alargarse mientras DG COMP trabaja (¿?) en este expediente. Quién sabe si la Comisión no está siguiendo, sin más, el ejemplo del Tribunal general de cómo afrontar alegaciones de una determinada evolución del mercado: pongámonos cómodos y esperemos que esa evolución se produzca. Si nos permiten citar un famoso ejemplo de sabiduría danesa: «Hacer predicciones es muy complicado, especialmente si son sobre el futuro.”

Y pensándolo bien, avanzar saltando parece sensato mientras la ruta convencional hacia la innovación en el #MWC16 siga trabada por las huelgas en la red de transporte público de nuestra querida ciudad.